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Centro de Querétaro
Queretaro, Querétaro de Arteaga
¿Qué es el Comercio Justo?
La Coordinadora Estatal de Comercio Justo en España[2], lo define como un comercio diferente al comercio convencional, que se basa en la justicia social, calidad de producto y el cuidado de la naturaleza. Fomenta una vinculación directa y de largo plazo entre pequeños productores y consumidores y contribuye a la construcción de un modelo de desarrollo sustentable y solidario.
En el comercio justo, los productores obtienen un ingreso digno y estable que impulsa sus propios procesos de desarrollo económico, social y cultural. Por otro lado, los consumidores reciben un producto de calidad certificada, elaborado con respeto a la salud y cuidado a la naturaleza.
Antecedentes internacionales
El comercio justo es una iniciativa que nace aproximadamente hace unos 30 años, impulsada por un pequeño grupo de pioneros que han intentado trabajar para poner en práctica un comercio más democrático para los productores de los países del sur como India, África, Sudamérica, Centroamérica, México, entre otros. El comercio democrático significa una repartición de la propiedad más justa, fomentar un trabajo organizado, acabar con el trabajo y la explotación de los adultos y sobre todo infantil, respetar el medio ambiente, poner en práctica los derechos humanos, siendo estos algunos de los principios más importantes (Roozen y VanderhHoff 2002).
Antecedentes en México
López Mallagón publica un interesante artículo sobre La Nueva Generación del Comercio Justo en México[3], él menciona que el comercio justo llega a México en la década de los ochenta, cuyo objetivo principal era lograr mejores condiciones para los productores de café que hasta entonces estaban en manos de los “coyotes” o especuladores. La perspectiva del comercio justo incluía tanto el aspecto social como el económico, a fin de resultar en una vida más digna para quienes trajababan en el campo mexicano, y tres décadas más tarde, el comercio justo aún representa aquellos ideales. Pero además, productores, funcionarios del Gobierno y organizaciones de la sociedad civil entrevistados por Deutsche Welle en México coinciden en que el comercio justo se enfrenta a nuevos dilemas como el incremento de la productividad, el cumplimiento de normativas originadas en el exterior y, en un plano principal, los efectos del cambio climático. También hay problemas distintos según el producto del que se trate (López 2010).
¿Cómo puede lograrse un comercio justo y que no atente contra la naturaleza y sus recursos? Sin duda todas las negociaciones comerciales deberían guiarse por principios básicos que tengan como objetivo principal el desarrollo económico, y que sean ante todo justos al igual que sus métodos de negociación (Stiglitz 2005).
Ya lo dice French (2006) “el comercio no es bueno ni malo por sí mismo. Pero la manera de llevarlo a cabo es a la vez una cuestión de gran preocupación, y una oportunidad sin precedentes. El comercio puede contribuir al avance del desarrollo sostenible o entorpecerlo. Dada la rápida destrucción de los recursos naturales de nuestro planeta, no hay duda de cuál ha de ser nuestra elección[4]”. Un comercio no justo es aquel que golpea económicamente a los países de menor desarrollo relativo, o si los beneficios en término del PIB son mayores para el país de mayor desarrollo. Los beneficios del comercio deben ser recíprocos, es decir, que los dos entes que realicen el intercambio se sitúen en un estado económico superior y de mayor desarrollo, y no solo para uno de ellos (Stiglitz 2005).
Los acuerdos comerciales justos son necesarios para el arranque del crecimiento y del desarrollo, pero además es necesario que se logre mejorar el acceso a los mercados y a las oportunidades comerciales, lo cual solo puede lograrse mediante un ajuste en la inversión privada y en la inversión en infraestructura por parte del gobierno (Stiglitz 2005).
¿Porqué y para qué nace el comercio justo?
El movimiento de Comercio Justo es una de las respuestas más fuertes que han surgido en contra de los problemas que enfrentan los productores de materias primas del Sur, siempre en desventaja. Pero no solo existe desigualdad en cuanto a la producción sino también en el consumo, en 1998 el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) dice que en consumo de productos de primera necesidad como legumbres y cereales, se consumen en el mundo por igual, pero los alimentos ricos en proteínas como pescado o la carne se distribuyen de forma más desigual entre ricos y pobres, así también el consumo de electricidad, teléfono y papel se concentra de manera progresiva en los países ricos.
Los principales criterios que promueven el Comercio Justo son:
- Salarios y condiciones laborales dignos para los productores del Sur, organizados en asociaciones, cooperativas o grupos con un funcionamiento democrático.
- Protección de los derechos fundamentales de las personas.
- Igualdad entre hombres y mujeres
- No explotación infantil
- Elaboración de artículos de calidad con prácticas favorables al medio ambiente
Las estrategias con las cuales funciona el Comercio Justo en el mundo son tres:
1. A través de comercializadoras integradas en su totalidad por pequeños productores, o en asociación con organismos civiles y/o empresas privadas, desarrollan productos, marcas, sistemas de distribución y puntos de venta para ampliar el alcance de los productos de sus socios en los diferentes mercados, tanto en México, como en otros países.
2. Sellos de Comercio Justo, que además del Sello Mexicano, también hay sellos de garantía, agrupados en la Organización Internacional de etiquetado de comercio justo (FLO por sus siglas en inglés) en 17 países desarrollados de Europa, demás de EU, Canadá y Japón. Existen empresas privadas y sociales que utilizan el sello de garantía en sus productos como aval del cumpliendo con los criterios internacionales de Comercio Justo. Existen hasta el momento siete productos que deben llevar un sello de garantía: café, cacao, miel, plátano, azúcar, jugo de naranja y té, garantizando su calidad, ecología y condiciones laborales justas.
3. Y las tiendas establecidas por diversas Organizaciones de Comercio Alternativo tanto europeas como norteamericanas y, más recientemente en México. En ellas se venden artículos producidos por organizaciones de pequeños productores de diferentes partes del mundo especialmente del Sur.
Productos que funcionan en el comercio justo
En este tipo de comercio funciona la venta de café, cacao, plátanos, mangos, jugo de naranja, miel, textiles y artesanías, la razón es que estos productos son tropicales y no pueden cultivarse en el norte, o en los países más desarrollados pero el problema es que la parte injusta no se detiene ahí ya que la parte más grande del comercio internacional en términos de dinero está en los productos manufacturados más que en las mercancías, es decir en los productos en los que se convierten las materias primas.
A manera de conclusión:
El consumidor es quien da un soporte al comercio justo a través de dos elementos:
1) El interés por los problemas económicos, sociales, ambientales y de injusticia laboral, y de respeto a los derechos humano.
2) A través de la compra de estos productos, con lo que contribuye a favorecer el ciclo de comercialización y consumo donde participan productores, certificadores, distribuidores, etc… lo que da como resultado un círculo virtuoso solidario.
Cuando compramos un producto además de satisfacer nuestra necesidad o un deseo colaboramos económicamente con los procesos que han hecho posible esos bienes, pero estos procesos tienen repercusiones sociales y medioambientales y en ocasiones sin saberlo aportamos con nuestra compra actividades que nos parecían inadecuadas o injustas, por tanto como consumidores podemos ser más críticos y responsables, el hecho es que estemos conscientes de las repercusiones tanto sociales, económicas, humanas, ambientales que tienen nuestros actos de consumir, y podríamos empezar a cuestionar sobre la procedencia de los productos, sus efectos en el medio ambiente, los materiales con los que están hechos, o bien las condiciones laborales con las cuales fueron hechas.
Con nuestra aportación hacia el comercio justo y nuestro consumo responsable es posible favorecer prácticas que estén de acuerdo con lo que queremos potenciar a nivel social y contribuir para tener un mundo más verde y más justo.
FUENTES:
*Roozen Nico y VanderHoff Frans, (2002) “La Aventura del Comercio Justo”, El Atajo, México.
*Ransom D., (2002) “Comercio Justo: Doble Comercio”, Barcelona, Intermón Oxfam.
*Comercio Justo México, AC., (2004) www.comerciojusto.com.mx/index.htm ¿Qué es el comercio justo?, 31/05/2004.
*Vinculación y comunicación social, AC., (2004) www.vinculando.org Comercio Justo, 01/06/2004.
*Fundación Vamos, AC., (2004) www.vamos.org Acerca de vamos, 01/06/2004.
*Intermon Oxfam, (2004) www.intermonoxfam.org Quienes Somos y Consumo Responsable, 31/06/2004.
*Max Havelaar, (2004) www.maxhavelaar.nl The Max Havelaar Foundation, 02/06/2004
[1] “Comercio Justo”. Revista del Consumidor. Editada por la Procuraduría Federal del Consumidor. Nº 331. Septiembre 2004. México.
[2] Coordinadora Estatal de Comercio Justo, http://www.comerciojusto.org/es/elcomerciojusto.html
[3] La Nueva Generación del Comercio Justo en México, http://www.dw-world.de/dw/article/0,,6240333_page_1,00.html
[4] Hilary French en Costly Tradeoffs: Reconciling Trade and Environment, citado en Why Fair Trade, Fair Trade Federation, 1996, también puede consultarse en: http://www.fairtradefederation.com/ab_whyft.html (Fecha de acceso: diciembre 2006).